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Nueva York; sexo, drogas y rock & roll II

¿Por qué meterte en una carrera callejera para contarme todo esto? -me dijo Tom una vez había recogido mi premio, oh si gané la carrera y tengo 3000 euros en mi bolsillo- En mi concepto una imagen vale más que mil palabras y prefiero que veas por ti mismo mis miles de facetas a que las descubras por los chismes de la prensa- le respondí con una sonrisa- Hay más de lo que vi esta noche, no es así -dijo observándome entretenido, al parecer a el le gustaba también este periodo de liberación- Bueno te menciones sexo, drogas y rock & roll, pero no pienso consumir éxtasis y mucho menos que tu lo pruebes, así que solo queda un paso por conocer-le dije con una sonrisa traviesa- La carrera era por el rock & roll, dime que si por favor -hablo apresuradamente mientras yo simplemente asentía esta sería una noche salvaje...
By Amber
¡Krystal! ¿Dónde estas, papá te necesita? -gritaba Math desde el primer piso, genial y ahora que hago, soy demasiado buen amiga, ya se llamaré a Bill-
Hallo -contesto alegre mi rockero favorito- Necesito de tu ayuda, ven a nuestra casa ya -le dije en un susurro-¿Pasa algo malo? -inquirió preocupado, Bill en definitiva era una ternura- Le pasará a tu hermano si no vienes enseguida, Adiós -dije finalmente y colgué ya que Mathew estaba llegando a mi habitación-
Amber, ¿tienes idea de dónde esta Krys? -pregunto Mathew entrando a mi habitación sin siquiera tocar – Ahm este, la verdad… oh yo abro la puerta-dije tan pronto escuche el timbre de la casa huyendo de mis torpes intentos de explicaciones a Math, el senador se las tendrá que arreglar con un simple “Esta dormida” la típica excusa del querido hermano de mi mejor amiga-
¡Billy! –grite al pelinegro mientras saltaba a sus brazos y el se sonrojaba, ¿podía ser mas tierno este chico?- Hola pequeña Amber, ahora ven conmigo y explícame que pasa –me dijo enarcando su ceja de esa manera en la que solo el y su hermano podían- Pasa mi querido Bill que mi mejor amiga se llevo a tu hermanito a pasar una noche loca al estilo Nueva York y yo soy la responsable, ahora que me cuentas tu-dije acercándome bastante a su rostro- Ando rescatando damiselas en peligro, aunque ahora me pregunto si en la gran manzana agradecen como en los cuentos de hadas –dijo susurrándome mientras yo me derretía poco a poco, este chico podía ser tan jodidamente sexy- ¿y cómo se supone que agradecen la princesas? -dije acercándome a el, después de todo era él el que me estaba tentando- Con un beso -dijo contento ante nuestra cercanía mientras nuestros labios se rozaban, sin esperar a más le dedique una sonrisa y rompí la poca distancia que había entre nosotros sumergiéndonos en un profundo y apasionado beso...
By Bill
Al parecer el príncipe encontró a su princesa encantada -le susurre mirándola con ojos brillantes- Eres estúpidamente romántico y aunque yo no lo sea ni un poquito, me encanta que seas así -dijo regalándome una de sus espectaculares sonrisas- Bueno y como ya sabes que soy todo romance imaginas que sigue ¿no es así? -le dije emocionado, tal vez y me podría saltar la parte incomoda- Nop, no se -dijo con voz de niña pequeña aunque sin abandonar su típica sonrisa traviesa- Ok, entonces lo diré ¿quisieras ser mi novia? -dije soltando un suspiro y ansioso por su respuesta que desgraciadamente aún no llegaba- Ok lo siento si me apresure, te entiendo, nos veremos luego -dije decepcionado mientras me daba vuelta para regresar a mi casa, sin embargo sentí como halaban mi chaqueta- ¿Pero que demonios? -dije molesto aunque se me paso cuando vi como Amber saltaba a mis brazos para darme otro de sus hermosos besos- Lo lamento soy nueva en esto del romanticismo y me tomaste desprevenida, aunque creo que una acción vale más que mil palabras -dijo ella a lo que yo le respondí con una sonrisa mientras giraba con ella en mis brazos, y pensar que hace un tiempo pensaba que este día nunca llegaría...
By Tom
100, 200, 250 kilómetros por hora y el velocímetro seguía aumentando y la adrenalina corría más rápido por mis venas, Krystal estaba sumergida en sus pensamientos desde hace un rato y a pesar de no poder leer su mente sabía que estaba feliz, sus ojos me lo decían, a pesar de que su mirada estaba fija en la carretera ella sabía que no estaba sola no era ese conductor fantasma del que mi hermano siempre escribía; ella era más bien como la furia de la carretera, un demonios disfrazado de ángel, y yo el idiota que cayo a sus pies...
¿En qué piensas? -dijo Krystal mientras bajaba un poco la velocidad, ya era hora íbamos por los 300 km/h- En ti, estas feliz y eso me pone feliz-respondí con total sinceridad- Más que feliz estoy confusa, preocupada y emocionada- me dijo sonriendo nostálgicamente- ¿Y a que se debe ese mar de sentimientos, mi ángel? -dije eso último sin pensar ya que después de lo anteriormente visto tenía más que claro que Krystal era de todo menos un ángel-Abandonamos tu auto tendremos que ir por él -me dijo aunque yo sabía que faltaba algo más- ¿Qué es lo que te preocupa Krys? -le pregunte inquieto- No quiero que este sueño se acabe, pensar que vivimos una ilusión apresurada, que quizás tu y yo éramos un capricho el uno para el otro, y que después de esta noche todo acabe, no puedo soportar una perdida más, no después de perder a mamá -me dijo con voz melancólica- A mi no me perderás, de eso estoy seguro, además tenemos muchas noches más por delante, hoy simplemente estaremos juntos no pasará nada más no a menos que tu quieras -dijo lo último con voz sugerente por lo que ella me regalo una sonrisa para luego sumergirnos en un cómodo silencio-
Llegamos, ven conmigo -dijo tomando mi mano y halándome al interior de un bonito y colonial edificio donde se leía "Hotel Ritz" y yo que pesaba que enamorarse era aburrido, que equivocado estaba con ella cada minuto era un experiencia totalmente nueva...
By Krystal
Tengo una reserva a nombre de Krystal Wayne -le dije a la recepcionista que observaba a Tom boquiabierta- La tenemos lista aunque creo que hay un error, aquí dice habitación doble pero supongo que son dos habitaciones ¿no? -dijo observando a Tom lascivamente, ¡a esa bruja no le interesaba que yo estaba ahí, y lo pero es que Tom ni siquiera se daba cuenta!- Es una habitación doble -dijo Tom aun entretenido, vaya aunque parezca un idiota mirando la decoración del hotel, definitivamente supo sacar de lugar a esa tonta recepcionista, santo cielo el amor me pone mal ya hasta ando de celosa u_u
Disculpe señor Kaulitz, aquí tiene su llave-le respondió la mujer otra vez pasándome de mi y entregándole la llave a Tom, ese acto me molesto más que cualquier cosa, esa mujer era una lanzada y poco importaba que yo estuviese hay parada, ahora no estaba celosa sino que me herían el orgullo, así que sin más ganas de soportar la situación arrebate la llave de las manos de Tom y me adelante al ascensor mientras el y la mujer me observaban extrañados- ¡Krys, espérame! -me dijo Tom corriendo al ascensor, se veía tan gracioso luchando con sus grandes pantalones, no pude soportarlo más y solté una gran carcajada mientras lo señalaba y las demás personas que estaban en el lobby nos observaban, en definitiva Tom me hace bipolar- ¿Tu eres bipolar o te llego la menopausia antes de tiempo? -dijo Tom agitado mientras yo reía aun más de su comentario- Tu me pones mal Kaulitz, me descontrolas -le dije ahogando las carcajadas y limpiando las lágrimas que caían por mi rostro a causa de tanta risa- ¿Así que te descontrolo? -dijo cargándome y entrando al ascensor conmigo en brazos- ¿Pero que rayos haces Tom? -le dije mientras me removía para que me bajaran- Responde y te bajo, ¿te descontrolo? -dijo acercando su rostro al mío provocando que me sonrojara ¡ maldición yo no me sonrojo!- Digamos que me revuelves un poquito la mente, pero se como arreglar eso, pero primero bájame ya respondí -le dije cuando escuche el timbro del ascensor, habíamos llegado a nuestro piso-
Ok, pero ahora dime ¿Cómo lo arreglaras?-dijo mientras caminábamos por el pasillo, por fin habitación 483, era hora de darle un nuevo significado a esa canción que tanto me gusto "Reden"…
By Tom
"483" marcaba la puerta en la que Krystal estaba introduciendo la llave mientras yo la observaba atontado, al parecer mi ángel ahora si sabe que es Tokio Hotel...
Ven aquí o te arrepentirás toda tu vida -me dijo halándome de mi camisa para darme un apasionado beso, uhm amo las soluciones que Krystal le da a sus problemas- Eres única, lo que siempre soñé -le dije entre besos mientras nos íbamos quitando nuestras prendas- Y por algún motivo tu eres el chico de mis sueños -dijo situándose sobre mi luego de haberme arrojado a la cama- Pues es hora de hacer tus sueños realidad -le dije y en un giró rápido para situarme sobre ella de ese momento en adelante todo fluyó como el agua caricia tras caricia, besos, mordiscos en verdad no pretendo relatarles todo con detalles, después de todo un caballero jamás relata las experiencias con una dama, solo les diré que esto en definitiva no fue solo sexo y que en medio de este amanecer hasta los astros son testigos de nuestro profundo, puro y verdadero amor, se supone que todo se acaba con este último beso, cuando llegamos a nuestro limite nos envolvimos en un abrazo para por fin permitirle a Morfeo tenernos entre sus brazos...