Y los que creíamos que eran inocentes…

Después de mi noche con Tom estaba totalmente rendida, sentía mi respiración acompasada con la de Tom mientras los rayos de sol se filtraban por las cortinas de la habitación de Tom.
Buenos días bella durmiente –susurro Tom mientras su aliente golpeaba contra mi oído- Buenas tardes dirás príncipe encantado, son las tres y media de la tarde y mi mejora amiga y tu hermano han de estar burlándose de nuestras travesuras-le dije con una sonrisa mientras dejaba a un lado mi móvil después de haber observado la hora en él- Que hablen lo que quieran, total sus inocentes mentes no llegaran a descifrar lo mucho que hicimos aquí-me respondió con una sonrisa perversa para luego aprisionar sus labios con los míos, lo que siguió fue una ligera repetición de nuestra noche anterior…
By Bill
En la noche, casa de Amber y Krystal
Hoy en definitiva era la noche Amber y yo llevábamos suficiente tiempo de novios y estaba más que seguro que ella me deseaba tanto como yo a ella, y esto se debía a las muchas veces que estuvimos a punto de perder el control y claro las miles de veces que mi querido hermano y mi cuñada los habían interrumpido, en fin esta noche no sería así, hace dos noches había tenido una muy seria charla con mi gemelo en la que le deje claro mis intenciones a lo que él me respondió con su típica sonrisa de autosuficiencia y con su típica frase de “Mi hermanito se hará hombre” como si el muy imbécil no supiera de mis anteriores chicas… En fin con la seguridad de que ni Krys ni Tom aparecerían por aquí, ordene a los empleados de la casa de las chicas preparar el ambiente ideal, después de todo Amber no era una chica cualquiera, hoy en día la podía considerar como el amor de mi vida, en fin luego de que comprobé que todo estuviera como yo lo quería ordene a todos que dejaran ese día la casa, que se lo tomaran de descanso que igualmente recibirían su sueldo, y finalmente traje a Amber aquí era hora de la verdad…
¿Puedo saber porque tanta emoción? –me dijo Amber mientras yo la conducía a través de los pasillos de su casa debido a que había vendado sus ojos- Las sorpresas no se cuentan, sino dejarían de serlo-susurre a su oído mientras sonreía al ver como unos cuantos bellos se erizaban ante mi cercanía- Bienvenida mi ángel –susurre a su oído mientras retiraba la venda de sus ojos, ante mis ojos apareció las más bella de las sonrisas que alguna vez mi princesa me pudo dedicar mientras se lanzaba a mis brazos, de ahí en adelante todo transcurrió en cámara lenta, nos besamos al principio con total ternura, poco a poco profundizando nuestros besos; cuando el calor se estaba apoderando de nuestro cuerpo levante a Amber mientras ella enrollaba sus piernas alrededor de mi cuerpo, camine tumbando uno que otro de los candelabros que rodeaban la cama para luego aplastar los pétalos que reposaban sobre la cama, justo en el momento en que caímos sobre esta, poco a poco la temperatura fue aumentando en nuestros cuerpos, y claro a esa misma velocidad nos íbamos deshaciendo una a una de nuestras prendas, por un momento desprendimos nuestros labios para recorrer con ellos nuestros cuerpos, yo me dedique a besar suavemente cada rincón el cuerpo de Amber, mientras que ella pasaba traviesamente su lengua por mis zonas erógenas lo cual me hacía suspirar de forma incontrolable, cuando terminamos con los juegos preliminares y llegamos a un punto tan alto de placer tome el condón, que gracias a las miles de precauciones que me hizo tomar mi hermano había dejado listo en una de las mesas de noche, me lo puse apresuradamente y ante los pedidos de Amber me hice uno con ella, poco a poco acelere mis embestidas a tal punto en que los gemidos de Amber y míos eran incontrolables, pero eso no importaba, lo único que importaba era que nos amábamos y que estábamos tan conectados que logramos llegar al final juntos, en un solo grito de placer mientras Amber se desplomaba sobre mi pecho, esto en verdad fue hacer el amor…
By Krystal
Después de nuestra deliciosa repetición apresuré a Tom a salir de la cama, después de todo no quería soportar lo hiperactivo de Bill y lo burlón que resultaba cuando nos descubría a Tom y a mí en nuestras noches alocadas, así que mientras Tom continuaba refunfuñando por mi repentino afán yo me dedique a introducir la llave de mi casa y a ingresar rápidamente a esta, todo estaba en silencio, algo muy sospechoso ya que aunque sea debería escucharse el ruido de las mucamas y mayordomos organizando la casa o de Amber practicando con su violín, pero el ambiente estaba en un sepulcral silencio, teniendo en cuenta las miles de amenazas que se cernían sobre nuestras familias y la falta de mensajes de aviso de salida por parte de Amber en mi celular, me puse un tanto paranoica y arranque a correr al segundo piso de la casa ante la atónita mirada de Tom…
Abrí una a una las puertas mientras las manos me temblaban cada vez más al comprobar que Amber no aparecía por ningún lugar, maldije en mi fuero interno el hecho de que mi padre me haya dado una casa tan grande, finalmente después de haber rebuscado por la sala de instrumentos, el estudio, la biblioteca, la sala de juegos, el mini cine y la sala de relajación; además de mi cuarto, llegue a la habitación de Amber, justo en ese momento observe a Tom correr desde el otro lado del pasillo como queriendo impedir que entrara a la habitación, sin embargo la preocupación por mi casi hermana fue mayor por lo que abrí rápidamente la puerta, cosa de la que ahora realmente me arrepiento…
¡Oh Santo Dios! –exclame cerrando de golpe la puerta de la habitación mientras Tom me observaba aguantándose la sonora carcajada que estoy segura moría por soltar, y es que como no, yo como una maniática rebuscando a mi amiga y cuando finalmente la encuentro noto que ella está totalmente distraída “jugando” al caballito sobre mi cuñado, cielos la imagen me dejo tan traumada que era incapaz de moverme de mi sitio y ante mi estado de shock Tom no supo que hacer más que arrojarse al suelo con una sonora carcajada que rompió con el anterior silencio de la casa, yo aún seguía absorta en mis pensamientos, ya que era ahora cuando recordaba los miles de sermones que me daban esos dos por mi “excesivamente” activa vida sexual con Tom, quien iría a imaginar que ante esa increíble inocencia y pulcritud que me mostraban serían más pervertidos que Tom y yo juntos, ya que a pesar de los pocos segundos que tuve la puerta abierta pude ver las manos de Bill sujetas a la cama con unas esposas ( a saber Dios de donde rayos las sacaron) mientras mi amiga los rasguñaba con unas uñas de metal (las cuales vi a Bill usar anteriormente en una alfombra roja), pensar que a los más inocentes amigos les iba el sadomasoquismo, este era un trauma que jamás iba a poder superar…
By Bill
Digamos que Amber y yo estábamos un tanto entusiasmados con nuestros jueguitos y habíamos pasado a un nivel un poco extremo, sin embargo el placer nos desinhibía completamente dejándonos ser totalmente libres, sin embargo en medio de mi shock pude escuchar un alterado grito por parte de Krystal y un portazo, al parecer Amber también lo escucho porque paro de repente, nos miramos a la vez con los ojos como platos al escuchar las sonoras carcajadas de mi hermano en el pasillo, era más que obvio la pobre de Krystal había entrado a la habitación…
Con todo el malestar del mundo Amber y yo nos separamos y o sin antes darnos una ducha de agua helada nos vestimos dispuestos a soportar las burlas de mi hermano ante lo que Krystal le contaría, sin embargo la complicidad obtenida durante esa noche fue tanta que nos dedicamos una mirada traviesa y con el susurro de “Lo repetiremos pronto” por parte de Amber, salí tomado de su mano, aunque no fue mucho lo que avanzamos ya que frente a nuestra puerta se encontraba Krystal blanca coo papel y justo frente a ella mi hermano revolcándose cual perro acompañado de unas frenéticas carcajadas que rápidamente me fueron contagiadas, ante mi sonora risa Krystal giro a vernos, y totalmente enrojecida salió corriendo a su habitación, al parecer nuestra pequeña amiga había logrado quedar traumatizada…