
One Shot Musik ist Liebe
Dos meses has pasado desde que ingrese a este conservatorio en mi amada ciudad Nueva York para cumplir mi sueño, convertirme en la mejor chelista del mundo entero y que las masas aclamen por mis acordes; por cierto mi nombre es Taylor Hodgson y tengo 19 años y como les dice hace poco estoy aquí luchando por mis sueños.
Taylor, vamos o llegaremos tarde a clases –me dijo Kate mi compañera de habitación y mejor amiga- Ok, en un minuto estoy contigo –dije cerrando mi diario y tomando mi chelo y unas cuantas partituras que tenía en mi escritorio- Vamos antes de que el señor Morgan nos suspenda por llegar tarde otra vez –dije a Kate quien simplemente asintió y corrió junto conmigo hasta las aulas que se halaban al otro lado del campus-
Señorita Hodgson, Señorita Miller; que gusto que decidan honrar nuestra clase con su presencia –dijo el profesor en tono irónico; ya que por más que corrimos como desquiciadas el tipo entro unos minutos antes que nosotras- Discúlpenos, no volverá a suceder –Dijimos Kate y yo y nos dirigimos a nuestros asientos rápidamente- Bien como les iba diciendo jóvenes, el día de hoy nuestro conservatorio tiene una increíble sorpresa para ustedes, cuatro integrantes de una famosa banda y su manager estarán deambulando por la escuela y buscaran nuevos talentos para llevarlos a grabar una colaboración en su estudio de los Ángeles –dijo el viejo con voz de comercial de TV alborotando a todos en la clase, las típicas chicas que ya planeaban hacer labor de búsqueda para ir por el camino de groupies, los chicos alegando por que no era una banda de chicas y por último los que solo planeábamos estar tocando día y noche para que sea quien sea el que nos esté supervisando definitivamente notará nuestro talento, y vaya que en este grupo éramos bastantes después de todo estábamos en Julliard la mejor academia musical de los Estados Unidos…
By Georg
Chicos me aburro, ¿a qué hora se supone que entraremos a buscar nuestro siguiente éxito? –musito Gustav arto de tener que esperar en la van a las afueras del campus- Gustav tiene razón, ¿Qué acaso no podíamos hacer un concurso como todas las bandas-dije yo también a los gemelos que nos observaban con una sonrisa en sus rostros- No somos una banda cualquiera –dijeron al unísono como si hubiesen planeado la maldita respuesta con antelación- Ustedes dos son una máquina del mal cuando se unen –dijo Gustav rendido posando su mirada nuevamente en la ventana- Chicos es hora –dijo Saki, nuestro amable guardaespaldas abriéndonos la puerta de la camioneta y dándonos la señal para bajar- Nos vemos chicos –dijeron los gemelos tomando un rumbo opuesto al que tomamos Gustav y yo en busca de aquella chispa de carisma que tanto anhelábamos –
Wow mira a esa chica- señaló Gustav mientras pasábamos frente a una de las aulas de clase, cuando dirigí mi mirada hacia ella prácticamente vi la flecha de Cupido llegar a mi corazón, era una hermosa rubia que tocaba un chelo con gran pasión y destreza; mientras yo la observaba anonadado.
Bro, sigue obserándola así y terminarás por gastarla -dijo Gus en medio de risas a causa de mi tonta mirada- Oh vamos Gus, no me digas que ella no es lo que buscamos, es sencillamente perfecta... -dije en un susurro mientras seguía observándola anonadado, lo último que supe fue que Gustav se marcho algo enojado, ni idea por que, solo me dejo ahí junto a esa bella musa-
By Taylor
El requiem del caos, una pieza sencillamente perfecta; amo tocarla es como si mi alma se fucionara con las notas y el resultado de esta unión saliera expulsada por las cuerdas de mi chelo; este era mi mundo donde la música y yo erámos una.
Eres increíble -escuche a mis espaldas por lo que deje de tocar inmediatamente y me giré asustada- ¡Oh no pares por favor! -exclamo un chico increíblemente guapo a mis espaldas, alto, imponente de sonrisa espectacular, unos ojos increíbles y su cabello ¡Santo Cielo! su cabello era hermosisimo. Me quede como una tonta observándolo de arriba a abajo, preguntandome una y otra vez como es que nunca lo habia visto antes por aquí, luego de mucho meditarlo la respuesta llego a mi como un rayo ¡El concurso! -T-tu ¿eres de la banda? -pregunte con la voz entrecortada y con los ojos como platos al pensar lo que podía acarrear su anterior cumplido- ¿Qué acaso me reconoces? -dijo señalandose así mismo con una sonrisa marcada en su rostro- Precisamente por que no te conozco es que lo pregunto -dije aún embobada con su belleza, debo en verdad tener una cara de tonta- Pues tienes razón, soy el bajista de la banda Georg Listing y ¿tu? -dijo acercandose a mi y tomando mi mano- Taylor, Taylor Hodgson -dije sumergida en las profundidades de su mirada- Ya veo Taylor- dijo acercandose más a mi- Sabes me interesas -dijo sujetandome por la cintura, mientras yo lo observaba entre espantada y extrañada- Y no precisamente solo como chelista- termino por borrar el espacio que había entre nosotros acercando sus labios a los mios plantandome un tierno beso, al principio pensé en resistirme sin embargo mi corazón me pedía a gritos que lo siguiera, y como siempre decidi hacerle caso-
Bro, sigue obserándola así y terminarás por gastarla -dijo Gus en medio de risas a causa de mi tonta mirada- Oh vamos Gus, no me digas que ella no es lo que buscamos, es sencillamente perfecta... -dije en un susurro mientras seguía observándola anonadado, lo último que supe fue que Gustav se marcho algo enojado, ni idea por que, solo me dejo ahí junto a esa bella musa-
By Taylor
El requiem del caos, una pieza sencillamente perfecta; amo tocarla es como si mi alma se fucionara con las notas y el resultado de esta unión saliera expulsada por las cuerdas de mi chelo; este era mi mundo donde la música y yo erámos una.
Eres increíble -escuche a mis espaldas por lo que deje de tocar inmediatamente y me giré asustada- ¡Oh no pares por favor! -exclamo un chico increíblemente guapo a mis espaldas, alto, imponente de sonrisa espectacular, unos ojos increíbles y su cabello ¡Santo Cielo! su cabello era hermosisimo. Me quede como una tonta observándolo de arriba a abajo, preguntandome una y otra vez como es que nunca lo habia visto antes por aquí, luego de mucho meditarlo la respuesta llego a mi como un rayo ¡El concurso! -T-tu ¿eres de la banda? -pregunte con la voz entrecortada y con los ojos como platos al pensar lo que podía acarrear su anterior cumplido- ¿Qué acaso me reconoces? -dijo señalandose así mismo con una sonrisa marcada en su rostro- Precisamente por que no te conozco es que lo pregunto -dije aún embobada con su belleza, debo en verdad tener una cara de tonta- Pues tienes razón, soy el bajista de la banda Georg Listing y ¿tu? -dijo acercandose a mi y tomando mi mano- Taylor, Taylor Hodgson -dije sumergida en las profundidades de su mirada- Ya veo Taylor- dijo acercandose más a mi- Sabes me interesas -dijo sujetandome por la cintura, mientras yo lo observaba entre espantada y extrañada- Y no precisamente solo como chelista- termino por borrar el espacio que había entre nosotros acercando sus labios a los mios plantandome un tierno beso, al principio pensé en resistirme sin embargo mi corazón me pedía a gritos que lo siguiera, y como siempre decidi hacerle caso-
¿Por qué? -pregunte una vez separamos nuestras bocas buscando aire- Por que eres la musa que llevaba tanto tiempo buscando -respondió el con una sonrisa surcando su bello rostro...
Mi nombre es Taylor Hodgson, tengo 21 años y actualmente me encuentro de gira con mi querido novio y su banda, hace ya dos años las notas del Requiem del Caos lo trajeron a mi, a su musa como aún me sigue llamando, desde siempre pensé que mi futuro estaria en la musica y al parecer tenía razón, ahora tanto mi pasado,presente y futuro son nada más y nada menos que una vida llena de amor; con esto pude comprobar que la música no es más que el amor escrito en notas, aquellas que solo el corazón logra interpretar...
Mi nombre es Taylor Hodgson, tengo 21 años y actualmente me encuentro de gira con mi querido novio y su banda, hace ya dos años las notas del Requiem del Caos lo trajeron a mi, a su musa como aún me sigue llamando, desde siempre pensé que mi futuro estaria en la musica y al parecer tenía razón, ahora tanto mi pasado,presente y futuro son nada más y nada menos que una vida llena de amor; con esto pude comprobar que la música no es más que el amor escrito en notas, aquellas que solo el corazón logra interpretar...
Hola a todos, mi nombre es Georg Listing el genialisimo y más guapo miembro de Tokio Hotel, por cierto no se lo mencionen a Tom aún le cuesta aceptar la realidad, hace dos años me aborrecía el solo hecho de tener que pisar una escuela en busca de nuestra siguiente compañera, sin embargo hoy en día no me arrepiento de nada, el ver a mi amada musa sobre los escenarios sumergida en su musica tanto como yo me sumerjo en la mia es sublime, pensar que unas cuantas notas me llevaron a ella aún se me hace algo increíble, sin embargo no por eso debo negar que el amor que sentimos fue a primera vista; algo dificil de comprender para muchos, sin embargo a mi vida llegó, de la nada, con una armonioza melodia, el que hoy para mi es el Requiem del amor...
Chicos no es hora de que sigan escribiendo en sus diarios -exclamó nuestro joven vocalista- Bill tiene razón, ya todos sabemos cuanto se aman ahora ¡A Rockear! -exclamo su hermano tomando su guitarra y corriendo rumbo al escenario- Ya ven chicos, es hora de empezar -susurro por último Gustav el único testigo de nuestro encuentro saliendo con sus baquetas en mano- Pues bien es mi turno -exclame cerrando el cuaderno donde escribia- Suerte, y espera por mi -dijo ella regalandome un hermoso beso y una bella sonrisa- Siempre -susurre antes de tomar mi bajo y salir corriendo al escenario donde miles de fanaticos aclamaban nuestra presencia-
Chicos no es hora de que sigan escribiendo en sus diarios -exclamó nuestro joven vocalista- Bill tiene razón, ya todos sabemos cuanto se aman ahora ¡A Rockear! -exclamo su hermano tomando su guitarra y corriendo rumbo al escenario- Ya ven chicos, es hora de empezar -susurro por último Gustav el único testigo de nuestro encuentro saliendo con sus baquetas en mano- Pues bien es mi turno -exclame cerrando el cuaderno donde escribia- Suerte, y espera por mi -dijo ella regalandome un hermoso beso y una bella sonrisa- Siempre -susurre antes de tomar mi bajo y salir corriendo al escenario donde miles de fanaticos aclamaban nuestra presencia-
¡Y ahora, recibamos a Tokio Hotel! -exclamo el vocalista de nuestros teloneros, ante nosotros una noche más de musica, una noche más donde aquella frase que hace tiempo dijo Cobain expresa nada más que la pura realidad, la historia de nuestras vidas, donde la musica y el amor son uno solo.
La música es sinónimo de libertad, de tocar lo que quieras y como quieras, siempre que sea bueno y tenga pasión, que la música sea el alimento del amor.
FIN
No hay comentarios:
Publicar un comentario