One Shot Love is Forever
¡Gran fiesta de disfraces! se leían por todos los rincones de mi escuela en los enormes y coloridos carteles que abarrotaban sus paredes, todos en la escuela estaban como locos pensando en que tipo de atuendo usar y en que pareja les iba a tocar, ya que al organizador se le ocurrió la "grandiosisima" idea de hacer citas a ciegas para todos ¿Quién imaginaria que tenemos el mismo número de chicos y chicas?, en fin no había otra cosa que hacer que aceptar toda esta algarabía...
!Gustav! -me gritó mi pelirrojo amigo desde la entrada de nuestra aula - Si sigues pensando en la inmortalidad del cangrejo terminaras por echar raíz en el suelo -me dijo burlón, mientras los chicos que estaban a mi alrededor reían de su comentario-
Esto no se queda así -dije mirando asesinamente a todos aquellos que reían mientras la cara de triunfo de Georg desaparecía rápidamente-
Viejo, lo siento -dijo Geo una vez estuvimos dentro del salón- No hay problema- conteste distraído- Sabes, no puedes seguir siempre así por ella -me dijo con voz paternal, después de todo si lo había notado- Lo siento pero estoy perdidamente enamorado de ella y ahora no sé si se ha olvidado de mi -comente cabizbajo, después de todo llevaba más de seis meses sin saber nada de mi querida Michelle. Se marchó hace un año de vuelta a Moscú debido al grave estado de salud de su padre, sin embargo meses atrás simplemente desapareció, no contesta mis llamadas ni mis e-mails, y francamente ya no sé qué hacer. Después de todo aún recuerdo el primer día que la vi; aquel segundo en que su imponente presencia se mostró en la entrada de esta preparatoria alemana y como se dirigió a mí con su lindo acento ruso, su horario, fue ese el motivo de que iniciara nuestra amistad y meses después nuestro noviazgo, sin embargo esto quedo en el aire cuando se alejó de mi para pasar con su padre sus últimas horas-
Gus, cuentas con nosotros y lo sabes -dijo Bill posando su mano en mi hombro en señal de apoyo, ya que Geo se había encargado de confirmarles mi situación en medio del receso- Gracias chicos -dije a todos con una sonrisa un tanto nostálgica después de todo no era mi intención "aguarles la fiesta"- Sabes Gus, no debes perder las esperanzas, estoy seguro que Mich pronto volverá por ti -menciono Tom, a lo que todos lo miramos sorprendidos después de todo de él esperaríamos cualquier consejo menos ese, yo diría algo como Te presentaré a una amiga, la olvidaras por ahora vaya el mayor de los gemelos por fin estaba madurando- Por primera vez Tom tiene razón, ella volverá y si su primo lo dice es por algo -finalizó Georg mientras Tom le daba un golpe en su cabeza por su anterior comentario- Gracias chicos en definitiva son excelentes amigos…
Después de ese día no se volvió a mencionar el tema, sin embargo su rostro aún seguía presente en mi mente y mi alma; sin embargo por ahora debía alejarla de mis pensamientos, hoy era la gran noche el baile anual de primavera…
Aeropuerto Internacional Sheremétievo, Moscú Rusia
¿Estarás bien? –Dijo la mujer a la chica que la observaba con impaciencia- si mamá, ya te lo dije; estaré bien, además estaré con tía Simone y con Bill y Tom ¿Qué cosa mala me podría pasar? –exclamó la castaña observando con suplica a su madre- Lo se hija, simplemente te extrañaré, en fin, vete o perderás el vuelo -exclamó la mujer con tristeza aunque dando un leve sonrisa- Adiós mamá –concluyó la chica, entregando su tiquete a la azafata y abordando el avión que la conduciría a su destino… Hamburgo, Alemania…
Preparatoria Günter Grass, Hamburgo 7:30 PM
¿No creen que sea algo temprano? –dijo el rubio a sus amigos, quienes ya revoloteaban como mariposas en medio del gran salón- Te recuerdo que debemos buscar a nuestras chicas –dijo Georg con una sonrisa traviesa adornando nuestro rostro- Sabrá Dios que planean hacer con ellas –exclamó Bill negando con su cabeza mientras Georg y Tom iniciaban la búsqueda de la chica que sería su cita-
Y tú que Bill ¿No buscarás a tu chica?-dijo el rubio a su amigo que estaba sentado a su lado- No ha llegado –dijo el pelinegro con una sonrisa traviesa- ¿Y tú como lo sabes? –Indago inquieto- Digamos que hice una ligera investigación –concluyó soltando una gran carcajada, quien sabe qué diablos hizo para averiguar quién sería su cita-
Bien Gus, me debo ir –dijo Bill luego de un rato, para luego caminar apresurado a la entrada donde Stephany, una de las chicas más lindas de la escuela lo esperaba con una sonrisa marcada en su rostro-
Los más tontos son los más suertudos –criticó Tom tomando ahora el puesto de su hermano- ¿Y tú gran dios Tom Kaulitz, no deberías estar en algún baño con tu cita? –Exclamé burlón al ver la cara de decepción que traía- Eso ya paso, y fue fatal –dijo emberrinchado- Vaya y ¿te fue tan mal que la dejaste tirada por ahí? –pregunte impresionado-Corrección, lo deje, era un chico!!! Como citan al gran Tom Kaulitz con un chico!! –Gritó enojado mientras yo lloraba de la risa- ¿No qué teníamos el mismo número de chicos y chicas? –Dije yo secando las lágrimas que caían por mi rostro a causa de la risa-
Oye pequeño felpudo –dijo Tom dejando de reír repentinamente- ¿Cómo que felpudo? –Exclame yo furioso- Deja de alegar y mira a la puerta, al parecer tu chica ha llegado –exclamo Tom con una notable sonrisa en su rostro mientras yo observaba impresionado a la puerta, al parecer ella tampoco me había olvidado…
¡Michelle volviste! –Exclame alegre mientras la estrechaba fuertemente entre mis brazos- Para nunca más volverme a ir Gustav –susurro ella pegando sus labios a los míos y sumergiéndonos en ese beso que desde hace un año llevaba esperando…
Aquella noche que prometía estar llena de nostalgia termino en un bonito final, Bill con su adora Stephany, Georg con una desconocida en algún rincón del salón, Tom al parecer decidió consolar a la chica que debía ser mi pareja; y claro está la interminable y maravillosa noche de Michelle y mia, donde como si se tratará de una película después de casi perder las esperanzas logre comprobar que el amor es para siempre y que cada vez que posas la mirada en aquella persona dueña de tu corazón un explosión tan sublime como el big bang nace en nuestros corazones, aquella infalible señal de que en verdad estas profunda y eternamente enamorado…
Hoy en día recuerdo esa noche, aquella en la que la que ahora sigue siendo la mujer de mi vida y futura madre de mis hijos, retorno a mis brazos, y que en un momento como ahora en el que por fin la convertiré en mi esposa, me hace pensar que ni el tiempo ni el espacio podrían hacer desaparecer nuestro amor, para todos hay un alma gemela, yo lo comprobé y espero tú también lo puedas hacer, después de todo el futuro acaba de empezar…
Con cariño,
Gustav Schäffer
!Gustav! -me gritó mi pelirrojo amigo desde la entrada de nuestra aula - Si sigues pensando en la inmortalidad del cangrejo terminaras por echar raíz en el suelo -me dijo burlón, mientras los chicos que estaban a mi alrededor reían de su comentario-
Esto no se queda así -dije mirando asesinamente a todos aquellos que reían mientras la cara de triunfo de Georg desaparecía rápidamente-
Viejo, lo siento -dijo Geo una vez estuvimos dentro del salón- No hay problema- conteste distraído- Sabes, no puedes seguir siempre así por ella -me dijo con voz paternal, después de todo si lo había notado- Lo siento pero estoy perdidamente enamorado de ella y ahora no sé si se ha olvidado de mi -comente cabizbajo, después de todo llevaba más de seis meses sin saber nada de mi querida Michelle. Se marchó hace un año de vuelta a Moscú debido al grave estado de salud de su padre, sin embargo meses atrás simplemente desapareció, no contesta mis llamadas ni mis e-mails, y francamente ya no sé qué hacer. Después de todo aún recuerdo el primer día que la vi; aquel segundo en que su imponente presencia se mostró en la entrada de esta preparatoria alemana y como se dirigió a mí con su lindo acento ruso, su horario, fue ese el motivo de que iniciara nuestra amistad y meses después nuestro noviazgo, sin embargo esto quedo en el aire cuando se alejó de mi para pasar con su padre sus últimas horas-
Gus, cuentas con nosotros y lo sabes -dijo Bill posando su mano en mi hombro en señal de apoyo, ya que Geo se había encargado de confirmarles mi situación en medio del receso- Gracias chicos -dije a todos con una sonrisa un tanto nostálgica después de todo no era mi intención "aguarles la fiesta"- Sabes Gus, no debes perder las esperanzas, estoy seguro que Mich pronto volverá por ti -menciono Tom, a lo que todos lo miramos sorprendidos después de todo de él esperaríamos cualquier consejo menos ese, yo diría algo como Te presentaré a una amiga, la olvidaras por ahora vaya el mayor de los gemelos por fin estaba madurando- Por primera vez Tom tiene razón, ella volverá y si su primo lo dice es por algo -finalizó Georg mientras Tom le daba un golpe en su cabeza por su anterior comentario- Gracias chicos en definitiva son excelentes amigos…
Después de ese día no se volvió a mencionar el tema, sin embargo su rostro aún seguía presente en mi mente y mi alma; sin embargo por ahora debía alejarla de mis pensamientos, hoy era la gran noche el baile anual de primavera…
Aeropuerto Internacional Sheremétievo, Moscú Rusia
¿Estarás bien? –Dijo la mujer a la chica que la observaba con impaciencia- si mamá, ya te lo dije; estaré bien, además estaré con tía Simone y con Bill y Tom ¿Qué cosa mala me podría pasar? –exclamó la castaña observando con suplica a su madre- Lo se hija, simplemente te extrañaré, en fin, vete o perderás el vuelo -exclamó la mujer con tristeza aunque dando un leve sonrisa- Adiós mamá –concluyó la chica, entregando su tiquete a la azafata y abordando el avión que la conduciría a su destino… Hamburgo, Alemania…
Preparatoria Günter Grass, Hamburgo 7:30 PM
¿No creen que sea algo temprano? –dijo el rubio a sus amigos, quienes ya revoloteaban como mariposas en medio del gran salón- Te recuerdo que debemos buscar a nuestras chicas –dijo Georg con una sonrisa traviesa adornando nuestro rostro- Sabrá Dios que planean hacer con ellas –exclamó Bill negando con su cabeza mientras Georg y Tom iniciaban la búsqueda de la chica que sería su cita-
Y tú que Bill ¿No buscarás a tu chica?-dijo el rubio a su amigo que estaba sentado a su lado- No ha llegado –dijo el pelinegro con una sonrisa traviesa- ¿Y tú como lo sabes? –Indago inquieto- Digamos que hice una ligera investigación –concluyó soltando una gran carcajada, quien sabe qué diablos hizo para averiguar quién sería su cita-
Bien Gus, me debo ir –dijo Bill luego de un rato, para luego caminar apresurado a la entrada donde Stephany, una de las chicas más lindas de la escuela lo esperaba con una sonrisa marcada en su rostro-
Los más tontos son los más suertudos –criticó Tom tomando ahora el puesto de su hermano- ¿Y tú gran dios Tom Kaulitz, no deberías estar en algún baño con tu cita? –Exclamé burlón al ver la cara de decepción que traía- Eso ya paso, y fue fatal –dijo emberrinchado- Vaya y ¿te fue tan mal que la dejaste tirada por ahí? –pregunte impresionado-Corrección, lo deje, era un chico!!! Como citan al gran Tom Kaulitz con un chico!! –Gritó enojado mientras yo lloraba de la risa- ¿No qué teníamos el mismo número de chicos y chicas? –Dije yo secando las lágrimas que caían por mi rostro a causa de la risa-
Oye pequeño felpudo –dijo Tom dejando de reír repentinamente- ¿Cómo que felpudo? –Exclame yo furioso- Deja de alegar y mira a la puerta, al parecer tu chica ha llegado –exclamo Tom con una notable sonrisa en su rostro mientras yo observaba impresionado a la puerta, al parecer ella tampoco me había olvidado…
¡Michelle volviste! –Exclame alegre mientras la estrechaba fuertemente entre mis brazos- Para nunca más volverme a ir Gustav –susurro ella pegando sus labios a los míos y sumergiéndonos en ese beso que desde hace un año llevaba esperando…
Aquella noche que prometía estar llena de nostalgia termino en un bonito final, Bill con su adora Stephany, Georg con una desconocida en algún rincón del salón, Tom al parecer decidió consolar a la chica que debía ser mi pareja; y claro está la interminable y maravillosa noche de Michelle y mia, donde como si se tratará de una película después de casi perder las esperanzas logre comprobar que el amor es para siempre y que cada vez que posas la mirada en aquella persona dueña de tu corazón un explosión tan sublime como el big bang nace en nuestros corazones, aquella infalible señal de que en verdad estas profunda y eternamente enamorado…
Hoy en día recuerdo esa noche, aquella en la que la que ahora sigue siendo la mujer de mi vida y futura madre de mis hijos, retorno a mis brazos, y que en un momento como ahora en el que por fin la convertiré en mi esposa, me hace pensar que ni el tiempo ni el espacio podrían hacer desaparecer nuestro amor, para todos hay un alma gemela, yo lo comprobé y espero tú también lo puedas hacer, después de todo el futuro acaba de empezar…
Con cariño,
Gustav Schäffer
hay que hermoso mini relato, eso de la cita de tom me hubiera hecho partirme en dos de la risa si no fuera porque estoy escondida en el rincon mas recondito de mi closed con la puerta cerrada para que nadie vea la luz de la pantalla de la lap... me pregunto como saldre de aqui, pero bueno ese problema lo solucionare cuando la bateria de mi lap se termine i me vea obligada a dejar de leer...
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